Con marcador de 6-2, los Gigantes empatan a Los Ángeles en una división tan reñida. Una buena actuación en el Dodger Stadium demuestra que la novena dirigida por Bob Melvin puede ser el caballo negro esta temporada en la MLB. Pues mientras todos tenían la mira puesta en Padres y Dodgers ellos se acercaron sigilosamente.
Gigantes no perdió el tiempo y desde la primera entrada se hicieron sentir. Willy Adames le conectó un cuadrangular a Yoshinobu Yamamoto y puso a los visitantes arriba en el marcador. Este batazo que salió al jardín central es el número ocho en esta temporada para Adames.
Los tablazos continuaron para los de la bahía. En la quinta entrada lastimaron nuevamente al japonés, pero el jonrón no fue solamente de una carrera como el de Adames. Casey Schmitt con un Grand Slam de 423 pies, trajo cuatro carreras al marcador y acabó con todas las oportunidades de los Dodgers.
Pero también el pitcheo fue esencial para este primer juego contra un rival divisional. Logan Webb lanzó siete entradas y solamente concedió dos carreras a una ofensiva que es de la más peligrosas en Grandes Ligas. Con esta salida, Webb gana su sexto juego en la temporada con efectividad de 2.58.
Ahora los Gigantes después de superar a Padres en los Standings tienen claro su próximo objetivo, tomar la primera posición de la Oeste de la Nacional. Después seguir buen béisbol para llegar a la postemporada y pelear por tener un lugar en la Serie Mundial.





