Con un marcador de 6-3, los Angelinos sufrieron una derrota contra los White Sox y dejaron escapar un juego que en la séptima pudo empatarse. Sin embargo, una mala decisión al correr de Gustavo Campero revirtió la decisión del umpire, y los Angels se desplomaron.
Los problemas empezaron desde temprano para la novena local. Dos bambinazos llegaron por parte de los White Sox, quienes se fueron al frente en el marcador. Andrew Benintendi mandó la pelota a las gradas del estadio con su jonrón número 15 de la temporada, y después lo acompañó Lenyn Sosa con otro tablazo.
La ofensiva de los Angels no respondía y fue dominada durante varias entradas, debido a un gran inicio del lanzador Shane Smith, quien mantuvo los batazos en el piso y propinó varios chocolates a una novena local que parecía no reaccionar en el campo.
Los White Sox siguieron castigando al abridor de los Angels, Tyler Anderson. En la parte alta de la cuarta entrada, Miguel Vargas, con un sencillo, y Andrew Benintendi, con un doblete, se posicionaron en las almohadillas con posibilidad de anotar. Luis Robert Jr., con un elevado de sacrificio, trajo la tercera al plato para los visitantes.
La pizarra finalmente se movió en la quinta entrada y los Angels recortaron distancia. Con Luis Rengifo en las bases, Gustavo Campero mandó la pelota como souvenir a un fan y, con un cuadrangular de dos carreras que viajó 438 pies, los locales se acercaron a sus rivales.
Otro jonrón de Chicago, complicó el partido para los Angelinos y aunque la ventaja era de dos carreras, las entradas se estaban acabando y los locales no pudieron responder a una ofensiva prendida del peor equipo de todas las Grandes Ligas.
El panorama lució bien para los Halos, pero debido a un error a la hora de correr las bases en la séptima entrada, el sueño de la remontada se esfumó. Sumaron una carrera más tras un elevado de sacrificio de Zach Neto, pero la jugada concluyó de forma desafortunada: Gustavo Campero fue retirado en tercera base antes de que el corredor pisara el plato, anulando así la anotación y cerrando la entrada.
Después de ese increíble error en las bases, el equipo se desplomó y perdió el juego tras recibir otras dos carreras en la octava y novena entrada. Los Angels no pudieron reponerse de la jugada de out de Campero y cayeron derrotados en casa y ante su gente.
Con esta dura derrota, mañana buscarán reponerse de ese error garrafal en las almohadillas e intentarán retomar el buen béisbol mostrado en las series pasadas. Un récord de 53-57 los mantiene en la cuarta posición de la División Oeste de la Liga Nacional.
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