Los Dodgers dominaron de principio a fin a unos Blue Jays que no encuentran el rumbo en Los Ángeles. Con un apabullante marcador de 9-1, los locales demostraron su poderío ofensivo y reafirmaron por qué son los campeones de la Gran Carpa.

Snell consiguió su tercera victoria en la actual temporada y hoy demostró que la organización campeona no se equivocó al traerlo. El ganador del Cy Young en 2022 lanzó cinco entradas completas, concedió tres hits y ponchó a 10 bateadores de los Azulejos.

La fiesta la comenzó el veterano Max Muncy, cuyo jonrón número 16 de la temporada remolcó a Freddie Freeman con un tablazo de dos carreras que viajó por todo el jardín izquierdo del Dodger Stadium. Rápidamente, los locales se pusieron al frente 2-0.

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El encuentro transcurrió sin problemas para los campeones; con un Snell encendido en la lomita, la ofensiva de Toronto jamás respondió y poco a poco fue dominada por el abridor de los Dodgers.

Shohei Ohtani enloqueció a todo el estadio con otra marca histórica en su carrera. El japonés conectó su bambinazo número 40 de la temporada y selló su cuarta campaña en las Grandes Ligas con esta impresionante cifra de cuadrangulares.

La fiesta continuó en Los Ángeles; la sexta entrada fue toda de los locales, quienes lograron definir el encuentro con un par de batazos oportunos. Dalton Rushing llegó al plato con bases llenas y cero outs, y capitalizó en un momento importante. Con un sencillo, remolcó a dos de sus compañeros para poner el marcador 5-0.

Después, Mookie Betts también se unió a la fiesta y, nuevamente con casa llena, logró herir a una novena de Toronto que se estaba cayendo a pedazos. Con otro sencillo remolcador, el campocorto de los Dodgers trajo dos carreras más a la pizarra.

La cereza del pastel la puso Andy Pages, que está teniendo una muy buena temporada. Con su doblete número 20 de la campaña, remolcó las dos últimas carreras de los locales y finiquitó un encuentro que desde el principio le perteneció a los Dodgers.

Toronto sumó la de la honra y, en la octava alta, anotó una carrera tras un bambinazo de Ernie Clement. El segunda base dañó al lanzador Jack Dreyer, y su tablazo viajó 391 pies para evitar la blanqueada en tierras hostiles.

Los Dodgers se mantienen en la cima de la División Oeste de la Liga Nacional y mañana buscarán barrer la serie frente a su afición. Con un récord de 68-49, alejan a sus perseguidores, los Padres de San Diego, a tres juegos.

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