No es momento de tirar la toalla, pero si sigues a los Mets o a los Yankees, seguro estás apretando los dientes. Agosto les está pasando factura y cómo jueguen estos días puede definir si la Gran Manzana sigue soñando con playoffs o empieza a cruzar los dedos para el próximo año.

Mets: ¿Crisis o colapso?

Los Mets han caído en una espiral descendente, perdiendo 10 de sus últimos 11 partidos. Con una nómina de $339 millones, se esperaba más. Desde el 28 de julio, promedian apenas 3.6 carreras por juego, bateando para .187 y con una efectividad de los abridores de 6.19. La ofensiva ha sido inconsistente, y el bullpen ha fallado en momentos clave. En su último encuentro, cayeron 7-6 ante los Milwaukee Brewers, sufriendo una remontada en los últimos innings .

A pesar de la crisis, Pete Alonso logró empatar el récord de más home runs en la historia de la franquicia con 252 . Sin embargo, este hito no ha sido suficiente para revertir la tendencia negativa del equipo.

Yankees: ¿Un equipo en declive?

Los Yankees, con una nómina de $297 millones, atraviesan su peor racha de la temporada, perdiendo 7 de sus últimos 9 juegos. En su última derrota, cayeron 7-1 ante los Houston Astros, con una ofensiva que apenas conectó tres hits . El abridor Max Fried permitió cuatro carreras en cinco innings, elevando su efectividad a 6.00 en sus últimos siete partidos.

A pesar de contar con jugadores como Aaron Judge, que ha tenido un rendimiento destacado, el equipo enfrenta problemas tanto en el montículo como en el bateo. El manager Aaron Boone ha expresado su confianza en una recuperación, pero el tiempo apremia

Tanto los Mets como los Yankees se encuentran en una encrucijada. Con 42 juegos restantes en la temporada, ambos equipos deben encontrar soluciones rápidas para evitar que sus aspiraciones de postemporada se desvanezcan. Los Mets deben mejorar su ofensiva y la consistencia de su bullpen, mientras que los Yankees necesitan recuperar su poder ofensivo y estabilidad en el montículo. El tiempo corre y la presión aumenta.