Aaron Judge todavía juega en la lista de lesionados y, según Boone, su brazo derecho probablemente no volverá a ser el mismo durante 2025. La estrella del Bronx, símbolo de poder y espectáculo, ahora parece más un riesgo que una garantía. Su regreso al jardín sigue en el limbo, mientras Giancarlo Stanton se encarga de “salvar” el derecho… pero ojo: el no podrá cargar con todo.
La lesión en Toronto dejó claro que Judge no es invencible. Desde que volvió como bateador designado, su .229/.426/.429 en 11 juegos grita “todavía no estoy al 100%”. Y Boone no se anda con rodeos: no habrá lanzamientos largos por ahora, no habrá heroísmo en el outfield hasta que los entrenadores digan “ok”.
Los Yankees, en plena lucha por el wild card, se enfrentan a un dilema: proteger a su gigante o arriesgarse a que su símbolo termine la temporada limitado. Mientras tanto, Stanton y Amed Rosario toman el relevo, pero el Bronx empieza a preguntarse si el capitán podrá sostener al equipo cuando más lo necesita.





