Los Padres de San Diego se llevaron la serie en casa contra unos Giants que se desmoronan poco a poco en la recta final de la temporada. Con un marcador de 8-4, la ofensiva de San Diego armó un rally de seis carreras en la quinta entrada que sentenció el partido.
Dylan Cease salió a la lomita por parte de San Diego y, aunque no tuvo la salida perfecta, consiguió su sexta victoria de la campaña. Trabajó cinco entradas completas, concedió seis hits, ponchó a siete bateadores y permitió cuatro carreras limpias, dos de ellas por vía de jonrón.
Del otro lado, el futuro jugador del Salón de la Fama, Justin Verlander, no tuvo una buena tarde en San Diego. El veterano salió molesto al bullpen después de lanzar cuatro entradas completas, recibir siete hits, no recetar ningún ponche y permitir siete carreras limpias, lo que elevó su promedio de efectividad a 4.64.
Los visitantes pegaron primero, y fue en la tercera entrada, después de varios errores a la defensiva por parte de los Padres, cuando los Gigantes se fueron al frente. Primero, Luis Matos conectó un elevado que ni Fernando Tatis Jr. ni Ramón Laureano pudieron fildear correctamente, y llegó a salvo hasta tercera base.
Después, Andrew Knizner conectó un doblete con dirección al jardín derecho que Tatis Jr. no alcanzó a cubrir y así Matos anotó sin complicaciones. Con corredores en primera y tercera y cero outs, Helliot Ramos bateó para una doble matanza y frenó el daño de los Giants a solo dos carreras.
San Diego le respondió rápidamente a los Giants y, en la cuarta baja, empataron el encuentro tras varios batazos oportunos. Tatis Jr. se embasó con un doblete y después lo acompañó Luis Arráez con un sencillo que lo colocó en la primera almohadilla.
El hombre del equipo, Manny Machado, remolcó a Tatis tras un machucón que lo movió al plato y llevó a Arráez a tercera base. Xander Bogaerts continuó remolcando carreras en San Diego y, con un elevado de sacrificio, trajo al venezolano a home.
San Diego tomó la ventaja en la quinta entrada después de jugar béisbol inteligente y aprovechar bien las bases. Ramón Laureano pegó un sencillo y, después, Jake Cronenworth recibió un pasaporte a primera. El receptor Freddy Fermín hizo moverse a todos tras ejecutar un toque de bola que terminó en error de tiro, y sus dos compañeros en base llegaron quietos para poner el encuentro 4-2.
Pero el daño no terminó ahí. Manny Machado conectó un doblete a lo profundo del jardín central, que permitió sin problemas que sus dos compañeros en base anotaran cómodamente tras ese gran batazo del dominicano.
Ya para cerrar la buena entrada ofensiva de San Diego, Xander Bogaerts y Ramón Laureano pegaron un par de sencillos remolcadores, para que la novena se despegara de los rivales y tomara la ventaja con un marcador de 8-2.
San Francisco respondió, pero no les alcanzó para darle la vuelta al marcador en tierras ajenas. Con dos cuadrangulares consecutivos, pusieron fin al juego de Dylan Cease y se acercaron tras un bambinazo de Rafael Devers y otro de Willy Adames.
San Diego se prepara para recibir mañana la serie más importante en casa, cuando se enfrenten a los actuales campeones, los Dodgers. A solamente un juego de diferencia de los líderes de división, se promete una serie cargada de emociones en la lucha por la cima de la Oeste de la Nacional.





