El regreso de Aaron Judge al jardín derecho debía ser fiesta para los Yankees. Pero lo que dejó la derrota ante los Blue Jays fue preocupación: el capitán mostró que su brazo aún no está recuperado, evitó tiros clave y sus lanzamientos carecieron de fuerza.
El propio Judge fue claro: “Eso es solo culpa mía. Como jardinero, tienes que tomar el control”. Mientras él asumía la responsabilidad, Aaron Boone eligió las evasivas. Ante la prensa, respondió con frases ambiguas como: “Lo estamos manejando como lo estamos manejando, ¿de acuerdo?”.
Las declaraciones encendieron al Bronx. Los aficionados acusan al mánager de minimizar lo evidente: que Judge no está al 100% y aun así lo arriesgan en septiembre.
Boone ya arrastra críticas por insistir con Anthony Volpe, malas decisiones en el bullpen y un manejo cuestionable del clubhouse. Ahora, su falta de claridad sobre Judge lo deja más expuesto que nunca.
Y aquí está el verdadero punto: Judge lidera la Liga Americana en OPS (1.103), HR (43) y RBI (97). Con números de MVP, lo lógico sería protegerlo. En cambio, los Yankees lo ponen en riesgo justo cuando más lo necesitan.
El Bronx lo sabe: un octubre sin Judge sería una pesadilla.





