San Diego se llevó la victoria en un dramático duelo de 11 entradas. Los locales dejaron en el terreno a los Brewers y, junto a su afición, sellaron el pase a playoffs por segunda temporada consecutiva. Freddy Fermín conectó el batazo decisivo que hizo estallar de euforia a todo Petco Park.

El abridor Nick Pivetta no tuvo una gran tarde desde la lomita y permitió tres carreras limpias, lo que parecía extender un juego más la oportunidad de los Padres de asegurar su lugar en el Comodín de la Liga Nacional.

Pero la ofensiva y el bullpen no quisieron esperar más, y desde atrás remontaron para celebrar este momento histórico en casa. La afición en el corazón de San Diego hizo pesar la localía y respaldó a su novena con la ilusión de alcanzar el primer título.

Milwaukee logró hacer daño a Pivetta y en la segunda entrada lo castigó con un par de batazos clave. Caleb Durbin abrió el marcador con un sencillo remolcador, y después Christian Yelich sumó dos carreras más para los campeones de la División Central de la Nacional.

Pero los Padres comenzaron a recortar la distancia. José Iglesias “Candelita” encendió la chispa con un tablazo que viajó entre el jardín izquierdo y central. Fue su segundo jonrón de la temporada y le devolvió la vida a una organización que nunca se rinde.

Dos entradas después, el marcador volvió a inclinarse para los locales. Con dos en base y dos outs, Luis Arráez “La Regadera” apareció con un batazo clutch que impulsó a José Iglesias desde la intermedia. Las 42,371 almas presentes hicieron retumbar Petco Park.

El juego se alargó y la historia llevó el desenlace a los extra innings. Los visitantes pegaron primero con una jugada de selección que José Iglesias estuvo muy cerca de concretar en home. Con ello, los Brewers se colocaron a solo tres outs de otra victoria.

Gavin Sheets empató el juego con un batazo que parecía apagar el sueño de avanzar a la postemporada. Sin embargo, un mal tiro del primera base de Milwaukee permitió que el corredor de San Diego llegara quieto al plato y el drama continuara.

A la defensiva, los guantes se lucieron: con bases llenas, lograron una doble matanza que terminó con el peligro de un equipo muy peligroso. Jake Cronenworth tocó segunda y lanzó a Arráez, poniendo de pie a toda la afición tras salir de un aprieto.

El punto final lo puso Freddy Fermín, quien con un sencillo al jardín central permitió que Bryce Johnson desde tercera llegara celebrando al plato. El bullpen estalló, y jugadores junto al cuerpo técnico acompañaron a “Ferminator” en este momento inolvidable

Con esta importante victoria, los Padres aseguran el penúltimo boleto de la Liga Nacional para jugar béisbol en octubre. Mañana buscarán repetir el resultado antes de afrontar los últimos cuatro juegos de la temporada regular en Petco Park.

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