En Inglewood, los San Francisco 49ers se llevaron una victoria dramática 26-23 en tiempo extra frente a los Rams, cimentada por una defensa férrea, un pateador confiable y un ataque alternativo que hizo lo justo cuando más importaba.
Pese a las lesiones y bajas sensibles, el equipo de la Bahía salió con coraje. Su quarterback suplente Mac Jones conectó 33 pases de 49 intentos para 342 yardas, dos touchdowns y cero intercepciones, liderando ofensivas claves cuando parecía que los Rams tomarían control. Kendrick Bourne fue el receptor más destacado con 10 capturas para 142 yardas.
Del lado de Los Ángeles, Matthew Stafford respondió con contundencia: lanzó para 389 yardas y tres touchdowns. El partido se definió cuando el pateador Eddy Piñeiro acertó un gol de campo de 41 yardas en tiempo extra, y la defensa de San Francisco frenó un intento de 4.º y 1 de los Rams en el cierre.
El juego incluyó momentos tensos como un balón suelto de Kyren Williams cerca de la zona de anotación que los Rams no pudieron capitalizar, y una ofensiva rival que remontó posiciones para forzar el tiempo extra con un gol de campo de Joshua Karty de 48 yardas.
A pesar de operar con un roster diezmado sin Brock Purdy, sin Nick Bosa entre otros los 49ers mostraron carácter y resistencia para imponerse. Ahora mejoran a 4–1 en la temporada, mientras que los Rams caen a 3–2





