En una noche perfecta en Wrigley Field, los Cubs dominaron de principio a fin y blanquearon 6-0 a los Brewers, forzando el Juego 5 de la Serie Divisional con una actuación redonda tanto en la lomita como al bate.

El héroe temprano fue Ian Happ, quien encendió al público con un jonrón de tres carreras en la primera entrada ante Freddy Peralta, estableciendo el tono de la noche. El abridor de los Brewers nunca encontró su ritmo, mientras la ofensiva de Chicago castigaba cada error.

En la sexta entrada, Matt Shaw amplió la ventaja con un sencillo productor, seguido por un bambinazo de Kyle Tuckeren el séptimo que prácticamente sentenció el juego. En la octava, Michael Busch puso la cereza con otro cuadrangular que selló el marcador final de 6-0.

Desde el montículo, Matthew Boyd brilló con luz propia: lanzó siete entradas en blanco, ponchó a ocho y permitió apenas cuatro imparables. Su dominio absoluto anuló por completo a los bates de Milwaukee.

Caleb Thielbar se encargó del cierre sin sobresaltos, asegurando la blanqueada y el rugido final del Wrigley.

Con esta victoria, los Cubs igualan la serie 2-2, forzando un decisivo Juego 5 en Milwaukee, donde los Brewers buscarán recomponerse ante un rival que ha recuperado toda la confianza.

MAS CONTENIDO