Concluyó la semana 14 de la NFL, otro fin de semana en el que tuvimos de todo: duelos divisionales, juegos de quarterbacks de élite, defensivas que mantuvieron a su equipo en la pelea y errores que marcaron el rumbo del partido. ¿Qué aprendimos de esta semana?

Los Rams de Los Ángeles recuperaron el sembrado #1 de la NFC tras vencer a los Cardinals por 45-17, y la derrota de los Bears les permitió alcanzar el liderato. El equipo de los Carneros demostró que la caída de la semana pasada fue un accidente y siguen siendo el equipo más sólido de su conferencia. 

El receptor Puka Nacua tuvo su mejor actuación de la temporada hasta el momento, llegó a las diagonales en dos ocasiones, consiguió 167 yardas, 7 recepciones y un promedio de 23 yardas por atrapada. Esto no hubiera sido posible sin Matthew Stafford, quien demostró que las intercepciones de la semana anterior son cosa del pasado, tuvo 3 pases de anotación, 280 yardas y 0 intercepciones. El equipo comandado por Sean McVay es favorito para llegar al Super Bowl

Los dirigidos por Andy Reid necesitan de un milagro navideño para clasificar a playoffs, mientras los números mantengan la esperanza, no hay nada definido. Después de la derrota de 20-10  contra el equipo de los Texans, los Chiefs están con un pie fuera de postemporada y la realidad es que fueron múltiples errores ofensivos y las lesiones los que terminaron por afectar al equipo.

Durante toda la temporada hemos visto que la línea ofensiva de Mahomes no es la más sólida, sino todo lo contrario, tiene poco tiempo para lanzar y desarrollar el juego terrestre. Ahora hay que sumarle que tiene 3 de sus linieros lesionados: Jawaan Taylor, Trey Smith y Wanya Morris. Cuando tienes poco tiempo para el desenlace de la jugada, necesitas que tus receptores te den la confianza de que pueden atrapar en cualquier momento, pero tampoco fue el caso.

 El cuerpo de receptores soltó más de 4 pases en momentos clave y cuando parecía que nada podía estar peor, su mariscal de campo lanzó 3 intercepciones, la más alta en la temporada para Mahomes, sumado a que no consiguió pases de anotación. La gran mayoría los quiere ver caer, sin embargo, mientras los números los mantengan vivos, la esperanza es lo último que muere. 

La derrota de los Cowboys 44-30 ante el equipo de los Lions los dejó en una posición muy complicada, el equipo de la estrella solitaria ya no puede perder ningún encuentro si quiere pasar a postemporada. Los Lions detectaron un problema en la defensiva profunda de su rival y no se cansó de atacar por aire. Entre Jameson Williams, Amon-Ra St. Brown y Jahmyr Gibbs por la vía aérea sumaron 20 recepciones y 265 yardas, aunque casi todas las anotaciones fueron por la vía terrestre. 

El calendario de los Cowboys es accesible, se enfrentan a los Vikings que ofensivamente no han demostrado que pueden funcionar, a los Chargers, tienen duelo divisional contra los Commanders que las lesiones a la ofensiva los han invadido y sin Jayden Daniels y Zach Ertz debería de ser un encuentro accesible y cierran la temporada enfrentando a los Giants, que llevan 7 semanas consecutivas perdiendo. En el papel los Vaqueros pueden ganar cualquiera de esos encuentros, pero un pequeño error podría acabar con su temporada.